MIS MUERTOS, TUS MUERTOS, SUS MUERTOS, NUESTROS MUERTOS

AQUI ES DONDE DUERMEN LOS MUERTOS DE MI CABEZA, EN ESTE CEMENTERIO LLENO DE MUSICA Y RISAS, DE FRIO Y TEQUILA, DE SOLEDAD Y MIEDOS, DE SUEÑOS Y DESEOS...

lunes, 16 de agosto de 2010

LA CAJA DE LA PRINCESA


Había una vez una princesa que no era feliz, ella vivía muy triste porque ningún hombre había sido capaz de demostrar su amor, a pesar de los presentes que le entregaban, oro, joyas, música, poesía, pinturas. Todo aquello que una mujer pudiese desear, así paso el tiempo, Un día llego un joven al reino, donde ella vivía, y pregunto, porque es que la princesa solo contemplaba desde su ventana el cielo por las noches y le respondieron que, era porque ella estaba enamorada de las estrellas y la luna pero jamás había podido enamorarse de un hombre, él la observaba todas las noches, un día, decidió pedirle matrimonio pero no tenia nada que ofrecerle, entonces pidió al carpintero hiciera la caja de madera tallada la más hermosa, con una estrella grabada al centro, así fue entonces que al terminarla el carpintero corrió al castillo a ver a la princesa, se postro ante ella y le dijo,- hermosa mujer, yo te amo, y tanto te amo que un día salí a buscar una estrella para ti, y la guarde en ésta cajita es tuya, y es muestra del gran amor que tengo por ti, tu amas la noche y de ella te entrego su luz.
Ella al ver este gesto de amor le miro y le dijo,- tu comprendes mi pasión por la noche, y has buscado darme algo solo para mi, por complacerme, tu debes amarme mucho, él respondió, si tanto para traerte un pobre regalo, solo que no puedes abrir la caja o la estrella quemara tus ojos, entonces coloco un candado en ella y se dejo amar por aquél hombre, pasaron los años y vivieron muy felices, pero un día el cayo enfermo y antes de morir le pidió que abriera la caja,
Ella lo hizo y solo miro un espejo dentro de ella y una nota de decía,
Hermosa mujer, no puedo darte una estrella, porque con tu belleza la opacarías, ya que tu eres más hermosa que todas las que brillan en el cielo, perdóname si es que te he mentido pero sólo de está manera podía intentar entrar a tu corazón, te amo y solo eso puedo darte, el gran amor que siento por ti y que no puedo encerrar en una caja.
Ella comprendió entonces que, el verdadero amor no se llena de regalos, sino de aceptación, él murió esa misma noche, y ella todas las noches contempla su cajita de madera bajo la luna y las estrellas para contemplar la más linda estrella, que aquél hombre le había regalado ella misma.

Este cuento es para una princesa real, con todo mi cariño para ti Karly.




Samantha Rojo

3 comentarios:

  1. aww samm Me encanto ... en serio ke me gusta tu escritura ... tu estilo ... me encanta muchas gracias por compartirlo ^^

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  2. Gracias por compartir Samantha, siempre es un placer leer tus cuentos, saludos y buena vibra!!

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  3. AIII AMIGA lo leo y me llena de emocion... lo he leido 20 veces y me sigue emocionando igual.... sigue inspirandote... tqm besitos

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